Daryel Rodríguez estudia diseño gráfico y realiza una pasantía en Iniciativa Amotocodie. Su pronta fascinación por la relación de los Ayoreo con su territorio y las fuerzas de la naturaleza lo inspiró y desde el año pasado viene realizando unos diseños que desde su arte representan esa conexión. Su fuente de inspiración son las historias, canciones chamánicas y relatos de los Ayoreo. Sus primeros diseños surgieron de la lectura del libro “Hablamos porque nos escuchan. 7 de Historias de Vida Ayoreo” que guarda relatos de sus protagonistas en su día a día con el monte Chaqueño, antes de ser sacados a la fuerza del monte, como de sus vivencias durante el traumático contacto y la vida en las reducciones evangélicas. El martes 12 de mayo nos envió este tercer afiche promocional para un programa que los Ayoreo emiten en idioma propio dos veces por semana. Es el mismo que acompaña esta nota.
Daryel no es de mucho hablar, pero a nuestra consulta sobre la realización de este diseño nos respondió:
“Básicamente traté de simbolizar a una familia ayoreo velando por sus tierras ancestrales. El Chaco es la base de su territorio y lo puse allí, en perspectiva. Hay manos de hombre y mujer, siempre imagino que sus cuerpos se mezclan con la tierra, por eso se confunden en el mismo color. La mano de arriba es la de un niño que intenta sentir lo que sus papás sostienen. El palo borracho es muy conocido y los del Chaco tienen esa forma, yo lo puse como representación de las otras formas de vida de allá. Eso nomás”
Daryel tiene 18 años y su viaje al Chaco lo realizó a través de la tradición oral de los Ayoreo, transcribiendo traducciones y leyendo sus historias. Las imágenes que tiene de aquel territorio son la de las fotografías que nos ayuda a clasificar.
Por nuestras redes, y con su autorización, seguiremos compartiendo su inspiración.
