Testimonio de Enrique Pebi, líder de la comunidad Ayoreo Tiogai de Puertro María Auxilaidora, Carmelo Peralta Alto Paraguay:
“Ya estamos cansados de pedirle a la gente que contrata el brasilero que no destruya el bosque, pero este Bisol sigue metiendo topadoras y motosierras y roba los postes. Ñembotavy él, ñembotavy los menó que negocian con él. Ellos nos mostraron papeles, puros papeles, no tienen papeles que sirvan y entraron a nuestro territorio, ellos dicen que están en trámite de permisos con el MADES pero ya deforestaron y sacaron madera sin tener esos permisos. Ellos no tienen permiso forestal tampoco. Pero siguen nomás.
Denunciamos a la fiscalía y no hacen nada, denunciamos a la policía y tampoco protegen, denunciamos al juez y hasta ahora siguen nomás destruyendo. Creo que no podemos quedarnos con las manos cruzadas. Cómo vamos a respetar a ellos si ellos no respetan a nosotros ni a ningún paraguayo. Si no nos ayudaban los padres salesianos y otras instituciones aliadas nosotros no íbamos a poder poner ni una denuncia. Viajamos por el río para una denuncia y una vez que regresábamos de Fuerte Olimpo casi naufragamos, empezó a entrarnos agua en al deslizadora estando en el medio del río, hasta nuestra vida se pone en peligro tratando de proteger nuestra tierra.
Son jodidos éstos. Nadie le quiere como nosotros le queremos a estas tierras. De esas tierras que ellos destruyen, nosotros sacamos remedios, que crecen ahí cerca del cerro. Nosotros sacamos de ahí ese gin sen que compran los brasileros de San Pablo, también cangorosa y otros remedios. Esos árboles allí son gigantes, nunca nosotros les sacamos, allí es zona de recolección de miel, pero no es que todos los días vamos, porque no es muy cerca, pero allí fuimos siempre para alimentarnos cuando en otros lugares faltó.
“Ya tienen luego mucha tierra ustedes”, nos dicen, son justamente esos terratenientes, que tienen tierra pero es solo para su familia, una o dos familias, nosotros estamos 300 familias de Ayoreo, no somo coñones. Con nuestra tierra vivimos, bien a veces y muy mal otras veces, pero nuestra cultura es así. A mi mamá y a mi papá no les gusta estas cosas de destruir el cerro que es sagrado para nosotros.
Fabio Bisol, esos menonitas de la empresa Mawes de Loma Plata, la gente que roba los postes para ellos, mejor que ya no se acerquen. Ellos hablan pero no respetan. Deberían ir presos y pagar por el daño que hacen. Ellos no tienen documentos para hacer lo que hacen allá, no tienen vergüenza tampoco, solo tienen jueces y fiscales para que les ayuden.
Nosotros ya no queremos que entre. Nosotros estamos unidos en esta cosa, todos los líderes de Puerto María Auxiliadora. No debemos dejar de balde esta cosa. Mientras trabajamos también cuidamos, hacemos recorridos para ver si todo está tranquilo, pero no, cada vez más avanza. Por eso digo que acá parece que manda ese brasilero. No respeta al juez, no respeta a los Ayoreo, no le importa el Paraguay, no respeta el medio ambiente.”